Los cuatro italianos se desplazaban a Catalunya con loas joyas falsificadas y se instalaban en pisos, hoteles o apartamentos de alquiler durante poco tiempo y adoptaban importantes medidas de seguridad
Las investigaciones se iniciaron tras la denuncia presentada por los legítimos titulares de los derechos de propiedad intelectual de las firmas de Tous y Bvlgari. Los denunciantes habían detectado que desde dos páginas web se estaban comercializando diferentes artículos falsos de las citadas marcas